Género Fantástico: un intento de definición

Si el portal Ñoño exhibe e intercambia Arte Ñoño (libros, películas, estatuas, etc), justo es preguntarse ¿cuál es el género artístico denominado Ñoño?

por I. C. Tirapegui

Pues bueno, para responder a esta pregunta hay que dirigirse a lo establecido en este “ensayo sin pretensiones estéticas“. Es decir, consensuar que el arte Fantástico representa en gran medida a lo que entendemos por arte Ñoño. Ergo, es lógico que el género artístico denominado “fantástico” representa al género Ñoño. O dicho como metáfora de 4 términos: el arte fantástico es al arte ñoño como el género fantástico es al genero ñoño.

¿Confuso? Lo que viene es peor…

Género fantástico

¿Qué es el género fantástico? Muchos han intentado dar una definición del género fantástico, pero por la amplitud de las expresiones artísticas y su multiplicidad de formatos, resultaría imposible. Por ello, comienzo por establecer que el objetivo de este texto es aportar con una definición práctica para el uso cotidiano de los ciudadanos de la nación Ñoño.

Un buen inicio para dar una definición del género fantástico es acotar su uso… para luego expandirlo. Por ello comenzaremos con aquellos pensadores que iniciaron la titánica tarea de definir qué es el género fantástico en la literatura…

El primero que brinda una definición aceptada por la comunidad es Guy de Maupassant, quien diferencia lo fantástico, de lo maravilloso y de lo insólito.

Posteriormente, sobre los hombros de Maupassant, el crítico estructuralista Tzvetan Todorov en su ensayo Introducción a la literatura fantástica, establece la definición del género fantástico más aceptada por el mundo literario. En este texto, él profundizó la definición de Guy de Maupassant y estableció 2 características del género fantástico: la duda del lector sobre la veracidad de los eventos narrados; y aceptar que dichos eventos no son alegóricos ni poéticos.​ Y con esto en mente, Todorov opone lo fantástico a lo maravilloso o insólito.

Según él, lo insólito agrupa aquellos relatos donde los eventos son aparentemente sobrenaturales, pero tienen una explicación que por más improbable que sea, es posible. Un ejemplo de esto es el cuento “Los crímenes de la Rue Morgue” de Edgar Allan Poe. En cambio, lo maravilloso corresponde a aquellas obras en que los eventos son explicados a través de leyes naturales que no están acordes a la realidad conocida.

Con esto en mente, el género fantástico propiamente dicho, es bastante escaso y abarcaría ejemplos como Otra vuelta de tuerca de Henry James. Por ello, la propuesta de Todorov ha recibido críticas y objeciones por su enfoque cerrado.

Una de las críticas más potentes a Todorov, lo realiza Rosemary Jackson, que plantea fallas en el modelo propuesto. El error reside, según ella, en que mezcla lo fantástico con una categoría literaria (lo maravilloso) con otra que no lo es: lo insólito.

En su ensayo Fanstasy: Literatura y subversión, ella propone estudiar lo fantástico no como un género, sino como un modo literario. Esto permite que la literatura fantástica pueda adoptar formas tan disímiles. Con este pensamiento, Jackson establece más incertidumbres que certezas en la comunidad literaria. Por ello y por la naturaleza cambiante dle lenguaje, otros lingüistas, filólogos, literatos se sumaron al debate y propusieron nuevas definiciones y enfoques.

El siguiente aporte lo realiza Pampa Arán, quien distingue entre ‘lo fantástico’, como categoría epistemológica, y ‘el fantástico’. En el primero entrarían las creencias religiosas, fenómenos de ocultismos, folklore y magia, entre otros; y en el segundo, en clave literaria, es la oposición del realismo.

Sin embargo, hay más visiones sobre el género, como la académicamente correcta y además, aceptada por el Ministerio de Educación de Chile, que dice más o menos así:

  • Mundo fantástico: es parecido al cotidiano, pero los diferencia un hecho que rompe con la normalidad y siembra la duda en los personajes y el lector. Ejemplo de esto es Carta a una señorita en París, cuento de Julio Cortázar.
  • Mundo maravilloso: el mundo maravilloso se entiende como un lugar donde todo es posible, lo raro es normal. Es común encontrar criaturas mágicas como elfos, dragones, gnomos, brujas o personajes que tienen poderes sobrenaturales. Ejemplos de esto son las sagas del Señor de los Anillos o Harry Potter.

Como ven, el debate está lejos de terminar y muchos otros aportarán a la definición del género fantástico. Por ejemplo, pueden ver otro punto de vista en este link. Pero para efectos de esta entrada, Pampa Arán entregó la clave para definir el género fantástico: es aquel género que se opone al realismo.

Imágenes de género fantástico


en la nación Ñoño

Esta definición es apropiada en todo aspecto, mas para acrecentar el debate y la ñoñería, agregamos nuestro granito a la definición del género: en ‘lo fantástico’ conviven 3 subgéneros: ciencia ficción, terror y fantasía.

Sin embargo, es discutible si una obra de terror puede ser realista o incluso, maravillosa. Y lo mismo se puede decir de la ciencia ficción. Por tanto, para entregar una definición del género fantástico, es necesario describir estos tres subgéneros y así aislarlos (o no) de lo que se denomina género realista o de lo que Todorov llama lo maravilloso. Ergo, continuamos…

Ciencia Ficción

La ciencia ficción es uno de los géneros derivados de la literatura fantástica de ficción, junto con la narrativa de terror y el libro de fantasía.

Aunque nació en la literatura, pronto se adaptó a los otros medios y soportes, como el cine, la televisión, el cómic, etc. Su apogeo fue durante la segunda mitad del s. XX, debido al espectacular progreso científico y tecnológico, y a una corriente mundial de pensamiento, denominada el Positivismo. Dentro de este contexto, uno de sus principales precursores fue el genial Julio Verne.

Es un género que especula sobre un futuro posible. Por eso, algunos autores se refieren a ella como ficción especulativa. Son relatos de acontecimientos imaginados, cuya realidad se fundamenta a través de la ciencia (física, quimica, biologia, etc).

La acción, los personajes, la época o el lugar donde ocurre la trama, puede variar infinitamente. Sin embargo, lo que parece una constante imposible de evitar, es que el Homo Sapiens está involucrado de forma directa, pues el marco teórico donde se sustenta la lógica de la historia, es ciencia humana. Ergo, es difícil imaginar un texto que hable sobre ciencia humana y no hayan personas involucradas. Aunque no imposible, claro.

Fantasía

dinosaurios y dragones

La fantasía (en este contexto) es un género artístico en el que hay presencia de elementos que rompen con la realidad establecida.

Nace junto con el desarrollo de la humanidad. Desde los albores del tiempo, el ser humano explicó los fenómenos naturales a través de su imaginación. Es decir, explicó lo natural con lo sobrenatural.

Este razonamiento se transmitió de boca en boca hasta transformarse en diversas obras de arte (literatura, teatro, etc.) y así nace la mitología de las primeras culturas. Mismas que evolucionaron hasta crear las religiones contemporáneas.

En resumen, es un género que nace bajo la forma de relatos donde hombres caminan sobre el agua, lanzan rayos desde el cielo, obran milagros o pelean con monstruos. Dioses e hijos de dioses que comparten los mismos defectos, virtudes y valores que las sociedades que los crearon.

En un sentido amplio, el género fantástico se halla presente en casi todas las obras de arte y sus formas derivadas. En particular, en las creaciones que más valoramos en el portal Ñoño, como literatura, cine,  cómic o historietas, videojuegos, pintura y escultura (arte plástico en general), juegos de rol y mucho más.

La principal característica del género fantástico es que las creaciones de fantasía no entregan una representación realista del mundo o cumplen con las leyes de la naturaleza. Aparte de esto, los límites son tan amplios como la imaginación humana.

Terror

El terror es la expresión máxima de el miedo o la fobia. Descrito en términos de conducta, sobreviene cuando tienes tanto miedo, que tu conducta no es racional, sino instintiva. Directamente relacionada al instinto de supervivencia.

Las personas tienen diferentes reacciones frente a esta emoción. Al ser una reacción instintiva, es impredecible, pero se han dado casos en que personas aterrorizadas sufren de parálisis completa del cuerpo, desmayo e incluso, hay registros de gente que ha muerto por paro cardíaco.

Como resulta obvio, un sentimiento tan poderoso y básico en el ser humano, ha inspirado a los creadores de todas las Eras del Hombre. Así hasta llegar al día de hoy, donde el terror se levanta como un género fundamental en la historia del arte contemporáneo y en particular, del género fantástico.

En simple, toda creación cuyo objetivo sea generar miedo en el observador, puede estar catalogada dentro de este genero. Ya sea una novela, un cómic, una película, una escultura o un videojuego. Lo importante es hacer saltar del asiento al usuario o receptor del mensaje de la obra de arte.

Y por lo mismo, podríamos decir que mientras más elevado sea el nivel de miedo logrado, mejor es la obra de arte.

Conclusión

¿Qué es el género fantástico? Es aquel género artístico que está en oposición al género realista. Con esto en mente y si aceptamos que el arte es una representación de la realidad, entonces “una obra de arte de género fantástico es aquella que no representa la realidad de forma realista“. Y esto significa que puede ser una obra del tipo fantástico o maravilloso.

O para efectos de esta entrada, un intento de definición:

  • El género fantástico es opuesto al género realista. Por tanto, cualquier obra de arte de género fantástico, no puede pertenecer al género realista, y viceversa. Además, dichas creaciones pueden pertenecer tanto al mundo de lo fantástico o lo maravilloso. Por último, esté género artístico está compuesto por 3 subgéneros: ciencia ficción, terror y fantasía.

Lo fantástico y el arte Ñoño

Finalmente, solo resta decir que una creación será de género Ñoño, si y solo si pertenece al género fantástico, según hemos definido aquí. Sin diferenciar si la obra de arte en cuestión pertenece al mundo de lo fantástico o de lo maravilloso; y sin importar si pertenece a la ciencia ficción, el terror o la fantasía.

Y con esto me despido. Pero antes, los dejo invitados a opinar y comentar. Nos leemos…

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