Para entrar en contexto, un cuadro ñoño es el conjunto “imagen + marco + composición” y el objetivo de esta entrada es definir los conceptos básicos para crear un cuadro ñoño.
Esta entrada es para establecer los conceptos, la teoría sobre lo qué es un cuadro ñoño. Si lo que tú quieres, es hacer tu propio cuadro ñoño, comienza por acá…
Enmarcar es un arte en sí mismo y por lo tanto, requiere habilidad manual, sentido estético y sobre todo, conocimiento teórico de los elementos esenciales para hacer el cuadro. Para eso definiré los diversos elementos que componen un cuadro ñoño, comenzando por el marco, la imagen que contiene y las características que diferencian un cuadro ñoño de un cuadro cualquiera. Porque una vez más, el objeto es encontrar una definición que sea apta para las necesidades de la nación Ñoño y sus ciudadanos.
Además, incluiré algunos datos y consejos para realizar de mejor forma el trabajo. Así que comencemos con las definiciones…
Cuadro Ñoño
Un cuadro ñoño será aquel donde una o varias imágenes se contienen dentro de uno o varios marcos. Además, el cuadro debe ser compuesto por imágenes ñoñas; es decir, imágenes de género fantástico, ya sean de ciencia ficción, terror o fantasía.
En un sentido práctico, un cuadro ñoño podría corresponder a una imagen enmarcada y cuyo resultado final pueda ser considerado como una obra de arte fantástico. Es claro que debe ser una obra de arte plástico y como se aprecia en la definición, no importa su valor estético u originalidad.
Componentes de un cuadro Ñoño
- Marco
- Marco con paspartú
- Marco sin paspartú
- Imagen
- Pintura
- Afiche
- Cartel
- Póster
- Composición
Marco
El marco es la estructura que soporta, protege y complementa una obra de arte plástico (pintura, dibujo, fotografía, etc.). El conjunto formado entre el marco y la obra de arte, se denomina cuadro.
Aunque no nos compete, existen los marcos de arquitectura o interiorismo, como los de puertas y ventanas. También se enmarcan objetos no artísticos, como espejos, diplomas, poleras, etc. Como vemos, el arte de enmarcar va más allá de la obra de arte.
Hay marcos de madera, metal o plástico, y de las más diversas formas y colores. Esto porque el objetivo estético del marco es destacar la imagen. Para ello, la materailidad y forma del marco busca separar la imagen de la superficie donde está puesto el cuadro ñoño (generalmente una pared).
Para este objetivo hay que considerar lo que pretendemos lograr con el cuadro, la imagen que contiene, el color de fondo, de la imagen, del marco, la composición de los elementos, etcétera. Por ello es bueno considerar las características de la moldura del marco, el color y el uso de paspartú.
Enmarcar, un arte en sí mismo
La enmarcación de obras de arte es un oficio que se origina en la Edad Media y desde entonces hasta hoy, se realiza con criterios estéticos. El objetivo es que el conjunto, el cuadro en su totalidad, sea “hermoso”. Para esto hay que tener en cuenta el lugar donde la pieza o conjunto de piezas se van a exhibir, los colores predominantes en las obras, el color de las paredes, la iluminación, el contexto, etcétera.
El marco y su estilo ha evolucionado a través de la historia. Por ejemplo, en Francia, en los siglos XVII y XVIII, se hizo habitual dorarlos y se diseñaban con formas “barrocas”, según la moda de la época. Hoy predominan los marcos lisos, con paspartú, para dar mayor importancia a la obra que exhiben y menos al marco que la contiene. También es común ver cuadros que unidos forman una sola imagen.
Los marcos se fabrican de madera, pero hoy en día también se usan metales (bronce, aluminio) o plástico. Aunque puede tener cualquier forma, lo habitual es que sea rectangular, cuadrado, redondo u ovalado. La inclusión de una cartela con los datos del cuadro, suele hacerse en la parte inferior del marco. Puede contener un panel de cristal o de algún sustituto plástico del cristal como plexiglás, para proteger la obra de arte ñoño.
Paspartú
Paspartú (del francés passepartout) o Marialuisa, es el marco que rodea las fotografías o pinturas antes de enmarcarlas. En muchos casos, se presentan como el único marco de la imagen en una exposición, para que el comprador elija el marco que desee.
Normalmente los paspartú son lisos, es decir, no tienen texturas o relieves, para que el observador se pueda concentrar exclusivamente en la imagen enmarcada. Por lo general son de cartón, cartulina o papel opalina, y poseen tonos neutros, como blanco (el más usado) o negro.
A veces las cosas más sencillas son las que más impactan, y en arte e interiorismo, a la hora de enmarcar cuadros, el mejor ejemplo es el paspartú. Este sencillo trozo de cartulina (u otro material) entre la imagen y el marco, tiene tantas posibilidades de uso creativo que, literalmente, puede transformar un cuadro y con él, todo el espacio que lo rodea.
Su principal función es la protección de la obra y sus bordes, pero su ancho y color separa la imagen de la moldura y esto permite crear contrastes, claroscuros, enfoques y matices, tanto para el cuadro como para la estancia en la que lo cuelgas.
Imagen
La imagen a contener en el marco es el centro y motivo principal del cuadro. En lo personal, me gustan los marcos sin adornos, para que sea la imagen la protagonista del cuadro, pero hay marcos con molduras tan barrocas, que el marco es una obra de arte en sí mismo. Pero más allá de llas preferencias, sin duda la imagen es el componente principal de cualquier cuadro.
Esta imagen es, en la mayoría de los casos, una lámina delgada y sobre su superficie está la imagen. Esta imagen puede ser una ilustración, un dibujo, una fotografía o una pintura. Y puede ser original o una copia impresa.
En este contexto hay varias maneras de clasificar dicha imagen, pero nos concentraremos en las principales: afiche, póster, cartel y pintura.
Cartel
El cartel es una lámina de papel, cartón u otro material similar, que se imprime con texto, imágenes y todo tipo de signos gráficos. Sirve para difundir información, promocionar un producto, realizar propaganda o como elemento decorativo para colgar en la pared.
Además de la cartelería publicitaria, existe una larga tradición de cartelería política. El cartelismo político fue especialmente importante en la primera mitad del siglo XX, sobre todo durante el periodo de entreguerras (1914-1918). El cartel bélico fue muy utilizado en ambas guerras mundiales.
Afiche
El afiche es un término que hace referencia a un cartel. Se trata, por lo tanto, de una lámina de papel u otro material en la que hay textos, imágenes o ambos. La noción de afiche se utiliza mucho en América Latina.
En términos generales, todo material impreso que transmite algún tipo de mensaje visual y que sirve como anuncio para la difusión de información, puede definirse como afiche. Puede ser una imagen que promociona un producto, un servicio, un evento o un mensaje político, y por lo tanto, su objetivo es atraer la atención del espectador.
Poster
Póster es una palabra de origen inglés (poster, sin tilde), admitida en el diccionario de la RAE para referirse a los carteles que han perdido su función publicitaria o propagandística, y ahora sirven únicamente como medio de expresión artística. Su plural es pósteres.
Un póster es una impresión sobre una lámina de papel de cualquier tamaño, diseñado para ser colocado en una pared o en una superficie vertical, y cuya única función es decorativa. En él se incluyen imágenes de cualquier tipo, elementos gráficos o textos, creados por medio de grabados, litografías, fotografías, dibujos, diseño digital, etcétera.
Son usados para reproducir obras artísticas en un formato económico, masivo y de gran valor decorativo. También se usan como recurso educativo o elementos de difusión de obras de arte ñoño, como cómic, libros, novelas gráficas, etcétera.
Pintura
La pintura es una de las expresiones artísticas más antiguas y una de las siete Bellas Artes. En estética o teoría del arte, la pintura está considerada como una categoría universal que comprende todas las creaciones artísticas hechas sobre superficies. Una categoría aplicable a cualquier técnica o tipo de soporte físico o material, incluidos los soportes o las técnicas efímeras así como los soportes o las técnicas digitales.
La práctica del arte de pintar, consiste en aplicar en una superficie —una hoja de papel, un lienzo, un muro, una madera, un fragmento de tejido, etc.— una técnica determinada, para obtener una composición de formas, colores, texturas, dibujos, etc. y cuyo resultado es una obra de arte, según algunos principios estéticos.
Para efectos de un cuadro ñoño, cuando hablamos de una pintura, esta debe ser de género fantástico y además, original. Es decir, no es una copia impresa, sino que está pintada a mano sobre la superficie escogida. En general, una pintura tiene un valor muy superior a una copia impresa y por lo mismo, la elección del marco que la contendrá, es de vital importancia.
Composición
En general, cuando se habla de un cuadro, la idea de composición se refiere a la imagen en sí, pero como esta entrada es sobre el cuadro ñoño, no hablamos de la composición de la imagen, sino de la composición de los cuadros. Es decir, la forma en que se ordenan uno o varios cuadros para que en su conjunto, estructuren una sola obra plástica de arte ñoño.
En concreto, la idea es ordenar uno o varios cuadros que en su conjunto construyan una composición artística de genero ñoño. Por ejemplo, en la imagen de abajo podemos ver 3 cuadros de dinosaurios ordenados de forma vertical. Estos cuadros tienen paspartú, porque las imágenes son independientes, pero su tema ñoño es común. En cada cuadro se aprecia una criatura prehistórica; en la imagen de arriba, un dinosaurio alado, en el centro la imagen de un animal terrestre y abajo, un reptil acuático. Aire, tierra y agua, ordenados verticalmente, de arriba a abajo.
En esta misma imagen podemos apreciar que para componer una sola imagen con varios cuadros, es recomendable no usar paspartú, como es el caso del jinete del tiranosaurio. Por el contrario, cuando son pocos cuadros o están ordenados en línea, el uso del paspartú es una opción personal (King Kong enfrentado al tiranosaurio).
Ideas para enmarcar
La imagen de arriba es un buen ejemplo para mostrar el uso apropiado de varios marcos, y sirve para aclarar la idea de composición en un cuadro ñoño. Pero la verdad es que la combinación entre moldura, marco y paspartú, ofrece muchas posibilidades y aquí dejaré 10 ejemplos que te pueden servir para armar tus cuadros.
Marcos estrechos con paspartú ancho
Una de las disposiciones siempre útiles. Un marco delgado permite hacer una transición sencilla entre la obra y el color de la pared, y la anchura del paspartú permite a la imagen gozar de autonomía respecto al color del entorno.
Marcos anchos con marialuisa
Marialuisa es otro de los nombres aceptados para el paspartú. Se cree que nació en Francia con la costumbre de llamar a algunos objetos con el nombre de personas famosas. En este caso, se dice que hace referencia a la segunda esposa de Napoleón, María Luisa, cuyos retratos son de los primeros en los que se ve ese espacio liso entre la obra y el marco.
En cualquier caso, cuando se habla de marialuisa, en general se refieren a un paspartú de madera. Esta doble combinación con moldura de madera es idónea para enmarcar cuadros clásicos, óleos, acuarelas, y otras pinturas originales.
Obras pequeñas con paspartú gigante
¿Cómo enmarcar una imagen pequeña y que destaque en la pared? Un sistema fantástico es utilizar un paspartú desproporcionadamente grande. Con esto se consigue un potente foco de atención en torno a la imagen. Ese inmenso espacio liso entre el marco y la obra, aumenta su importancia y multiplica su valor de forma proporcional a la anchura del paspartú.
Paspartú oscuro con obras oscuras
Esta combinación es más arriesgada. Según el contexto, se puede considerar elegante o aterradora. Es fantástica para imágenes macabras o para dar un toque gótico a un entorno. También es útila para esas imágenes oscuras que tiene un pequeño toque de color o luz.
Paspartú claro con obra clara
En el otro extremo, tenemos la combinación de paspartú claro con obras claras. Ésta es la opción que debes elegir si quieres iluminar el entorno. Una fórmula ideal para espacios de colores neutros.
Paspartú claro con obra oscura
Ésta opción sirve para destacar imágenes muy oscuras, minimalistas o monocromáticas, ya que necesitan mucho contraste para destacar en una pared. El espacio en blanco separa las tonalidades del entorno y concentra el foco en la oscuridad de la pieza, proporcionándole el protagonismo necesario.
Paspartú oscuro con obra clara
El contraste inverso al anterior: rodear de oscuridad una obra de bases blancas o muy claras. Con esta combinación se crea un efecto de túnel, una ventana a un más allá en el que la obra brilla y destaca como la luz al final del túnel.
Paspartú de color
Ésta es una combinación arriesgada: el paspartú adquiere protagonismo, y no sólo crea espacio extra alrededor de la imagen, sino que se integra a ella, ampliándola e incluso, cambiando el carácter de la misma. Es una opción muy interesante en espacios monocromáticos, para añadirles un chispazo de color que sacuda y revitalice el espíritu.
Paspartú doble
Consiste en superponer un paspartú sobre otro, en el mismo color o jugando con los tonos de la imagen. Se crea así un doble foco que añade profundidad a la obra. Esta sensación visual puede amplificarse al poner cartón entre los dos paspartús, acentuando así el efecto 3D.
Paspartú creativo
Ni la moldura ni el paspartú tienen por qué conformarse con solo acompañar a la obra. Como el caso del paspartú de color y el doble paspartú, tanto marco como marialuisa pueden darle un nuevo sentido artístico a la imagen. La idea es envolver la obra con la creatividad y el arte del enmarcado.
Videos tutoriales para crear un cuadro ñoño
Con esto cierro la entrada, pero antes los invito a crear sus propios cuadros ñoños, con o sin paspartú, como composiciones grupales o como elemento único. Y para ayudarte más, aquí te dejo un link para que puedas imprimir tus imágenes y un marco para contenerlas: afiche personalizado.
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