Descripción
Katana blanca de metal y madera con detalles metálicos envejecidos. Tiene un dragón tallado a mano en la vaina.
Medidas aproximadas:
- Largo mango: 26 cms.
- Largo hoja: 69 cms.
- Largo total: 101 cms.
Katana
La katana es un sable japonés (daitō), aunque en Occidente esta palabra es usada para englobar a todos los sables japoneses, pero el vocablo se refiere a un tipo particular de sable, de filo único, curvado y tradicionalmente utilizado por los samurái. Su tamaño más frecuente ronda el metro de longitud y el kilo de peso.
El tipo de katana más difundido en la actualidad es el conocido como “Oda Nobunaga”, en alusión al daimyō creador de dicho modelo, de hoja curva y alrededor de un metro de longitud total.
Origen
El origen de la katana japonesa se remonta a los siglos X-XII, cuando la dinastía Song (China) introdujo al país una espada curva llamada “el destripador de caballos” (斩马刀), nombre dado por ser un arma utilizada contra la caballería para destripar el vientre o atacar los cuartos delanteros del caballo. Esta espada, más adelante conocida como sable, evolucionó hasta convertirse en la afamada katana japonesa.
Características
Debido a su hoja curva con filo único , la katana es realmente un sable y como tal, está más orientada al corte que a la estocada. Su curvatura surge de la necesidad de obtener un corte eficaz cuando se maneja desde el caballo, porque la hoja recta tiende a “empotrarse” en el momento del corte, mientras que la curva consigue siempre un corte tangencial a la trayectoria del arma y con ello evita que la katana se bloquee.
Aunque el arte del manejo del sable japonés, según su propósito original, ha quedado casi obsoleto, el kenjutsu (conjunto de técnicas de sable) influyó poderosamente en los rituales, técnicas y tácticas de varios gendai budō, o artes marciales tradicionales modernas, como el Aikido, el Iaido, el Karate Do, el Kendo, el Ninjutsu, e inclusive el Judo. Muchas técnicas provenientes de varias escuelas de samurái clásicas siguen practicándose hoy, especialmente en el Ninjutsu y el Aikido. Mientras tanto, la esencia de su manejo persiste en el arte del iaidō (iai jutsu), que es el arte de “desenvainar cortando” y en las formas del kendō (camino del sable) en donde se maneja una réplica del sable hecha en bambú llamada shinai, y se usa como protección una máscara/casco (men) y una armadura (bogu).
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