Hay varias películas ñoñas que contienen escenas inolvidables y que jamás estuvieron en la mente de los guionistas. Es que el guión no está escrito en piedra, puede variar, y varía, según la interpretación del actor o el director. Y de eso trata esta nota, aunque claro, por un asunto legal y a favor de evitar demandas civiles y/o penales por parte del sindicato de guionistas de Hollywood, debo declarar lo siguiente:
- mediante la presente declaración, yo, el Canciller de Ñoño, no estuve en los sets de filmación ni compartí con los actores, tampoco cené con el director o invertí dinero en la producción de estas películas, por lo que las opiniones, actuaciones o veracidad de todo lo acontecido en dichas escenas, solo es responsabilidad de la Fuente.
Y solucionados los asuntos legales, pasamos a lo importante: el listado.
Cazadores del arca perdida
Recuerdan cuando Indiana Jones debía enfrentarse a un maestro de las espadas, un tipo que bailaba con dos afilados sables y amenazaba con usar a Indi como mantequilla para el pan. Pues en el guión aparecía una larga pelea de espadas, pero el día anterior, Harrison Ford se indispuso, o dicho sin eufemismos, andaba con una diarrea tan potente que debía estar a menos de cinco metros del water o contar con un par de pantalones limpios. Luego de discutir el problema con Steven Spielberg, la escena se cambió por algo más rápido y menos acrobático. Una bala y adiós. Rápido y tan eficiente, que es una de las escenas más memorable de Cazadores del arca perdida.
Batman. El caballero de la noche.
Recuerdan cuando Gordon es promovido a comisionado, todos sus compañeros lo felicitan y de pronto, fantasmal, un aplauso monótono, llenó de sarcasmo y que llenó el ambiente del set con el espíritu del Huasón. Un aplauso para Ledger y su oscura y brillante improvisación.
Otra de Heath Ledger, quien nos demuestra que su Oscar no fue un regalo póstumo, sino que se lo ganó con esta extraordinaria actuación de el Huasón, o Joker. Pero bueno, al grano. Esta escena debió ocurrir tal cual, pero sin considerar el baile que el antagonista de Batman realiza con el control remoto mientras explota el hospital. esa improvisación más un poco de edición logra una escena muy Huasón, si entienden a lo que me refiero.
Como nota personal, debo agregar que me hubiera encantado que en la tercera parte del Hombre Murciélago se hubiera enfrentado nuevamente con el Huasón, pero supongo que mi deseo quedará para otra vida.
Robocop
Luego de una tremenda paliza que le da Robocop, Clarence Boddicker es arrestado y presentado ante la policía, entonces él escupe un asqueroso y ensangrentado pollo sobre el escritorio y luego exclama a gritos: give me my f*ckin’ phone call!. Sus compañeros quedaron estupefactos frente a la improvisación del actor. Pues resulta que momentos antes, Kurtwood y Paul Verhoeven se reunieron y decidieron realizar de esa forma la escena, pero sin informarles del cambio en el guión a los demás actores. Y ahí pueden ver el resultado, la cara del policía y el escupo ensangrentado.
Alien: el regreso.
Caos y confusión reina tras el desplome de la nave espacial en que llegaron al planeta. Y entre todo ese humo y fuego, el actor Bill Paxton se lamenta: That’s it man, game over man, game over! What are we going to do now? Pues en el guión no aparecía lo de game over. Medio fomeque. Sí, un poquito, pero Alien merece estar en el listado, aunque sea con una tontera como esta.
Star Wars. Ep. V: El imperio contraataca.
El contrabandista devenido a héroe está a punto de ser encapsulado en carbonita cuando Leia le dice “I love You” y Han Solo debiera contestar “I love you too”. En lugar de eso, Ford atrapa la esencia del personaje, ese contrabandista seguro y egocéntrico, y responde la memorable “I know”. Sucinto y a la vez magistral.
El resplandor
Jack Torrance, el personaje de Nicholson, persigue a su esposa e hijo hasta el baño del hotel. ¿Recuerdan? Cierran la puerta justo a tiempo y el aspirante a novelista se abre paso a hachazos. Entonces, entre las astillas asoma su desquiciado rostro y afirma: here’s Johnny! Pues esa frase en cuestión se había hecho extremadamente famosa debido al programa de televisión The tonight show, protagonizado por Johnny Carson.
Pues esa improvisación es una de mis favoritas… el rostro, la voz, la mirada afiebrada de Nicholson. Yo lo agradezco y estoy seguro que Kubrick también, ya que él es el director y guionista, así que si no le hubiera gustado no estaría en la edición final.
Blade Runner
Esta es mi favorita por lejos. Para mi gusto, es la mejor porque conspira tanto la calidad de la película como el diálogo/monólogo del replicante, y sin embargo, toda esa bella improvisación se perderá como lágrimas entre la lluvia.
Cuando el replicante Roy Batty (Rutger Hauer) muestra piedad por el ex blade runner Rick Deckard (Harrison Ford), en la azotea del edificio. Recuerdan ese conmovedor monólogo de las memorias y la vida, cuando al final, ajeno al guión, el actor agrega la célebre frase: “… like tears in the rain”. Casi lloro.
La naranja mecánica
Alex (Malcolm Mcdowell) disfruta junto a sus compadres, los Droogs, del festín de violencia y sadismo en la casa de su víctima de turno. La escena fue grabada varias veces y Kubrick no se conformaba con el resultado, hasta que le dijo a McDowell, “haz lo que quieras”. Entonces, el actor se visitió de Alex y cantó “Singing in the rain” mientras violaban a la mujer. El mito cuenta que fue tanto lo que le gustó, que Stanley Kubrick fue a adquirir los derechos de la canción ese mismo día.
Y bien, sin más ni más, los dejo. Y recuerden, cualquier demanda civil o penal respecto de la autenticidad de la entrada, envíen un mail a mis abogados en Latveria: mail@abogados.lt < código: ñoño > See ya!
por Canciller Ñoño
< la Fuente >
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